Nunca fue importante decir demasiadas palabras, pero siempre lo hice.
Nunca di la oportunidad de hacer que alguien me conozca, ahora quiero experimentar un nuevo comienzo basándome en ello.
Quiero un lugar donde no tendré miedo de exponer mis temores, mis errores, mis imperfecciones.
Será como contar una historia de vida a gente que no le importa una vida sin mucho que contar en realidad.
Será como decir cuanto me importa, y a la vez contradecirme cuando no hago nada al respecto.



jueves, 17 de octubre de 2013

Reencuentro.

Si tuviera que empezar de alguna forma, siempre elegiría la que me ayude a poner todo lo que deseo dentro de unos cuantos párrafos. Pero es complicado. Así que empiezo diciendo que me complico demasiado, y que necesito seguir escribiendo mucho más. Ahora, tratemos de darle forma a esto. Volvamos al aire, o más bien, a tierra.

Días como el que tuve ayer, son un poco raros últimamente, pues hace rato que no tenía tantas ganas tan desesperadas de escribir como las que me agarraron. Tenía ganas de conquistar el mundo usando nada más que mis manos y mi habilidad de tipear. Leí todas las páginas de uno de mis diarios, volví a mirar una novela que dejé sin completar, reabrí viejos posts que jamás vieron la luz. En fin, me reencontré a mí misma, porque ya hace rato que había perdido esa perspectiva.

Reflexioné tanto sobre un montón de cosas, y quiero entender mejor para poder mejorar. De hecho, nunca me había sentido tan completa y tan llena de vida como me siento ahora. Y es diferente a otras veces que dije sentirme así pues esta vez es por mí misma, es pensando en mis deseos, en mis anhelos; sin interponer antes nada ni a nadie.Y lo más importante, sin lágrimas ni malestares de por medio. Así que es hora de reinventarme, hora de descubrirme sin ataduras, hora de dejar sentimentalismos atrás y hora de agarrar al toro por las astas y ganar la lucha. Pero la lucha apenas comienza.

Después de tanto tiempo habiendo estado en una relación, creo que había olvidado lo que se sentía estar sola, es decir, creí que ya no me sentiría plena sin tener alguien a mi lado. Y creo que en parte es cierto, no puedo disfrutar de muchas cosas lejos de todos, pero al menos al fin entendí que no necesito ese apego que creí que era tan necesario, ese apego emocional del que me pasé escribiendo en estos últimos meses. Repitiéndome a mí misma, perdí mi perspectiva, era imprescindible volver y dejar lo surreal de lado, nunca nada que exista va a ser así como imagino. Nada es tan idílico y perfecto como queremos hacernos creer. Siempre supe que nada dura toda la vida, pero me sentía exageradamente cómoda con esa idea de "forever" que me implantó el que creí era el amor de mi vida. Digo creí, porque ahora quiero pensar que vendrán cosas mejores, y que la muerte de un amor, es solo el comienzo de toda una nueva historia. 

Otro poco de lo que me di cuenta, es que quiero poder brillar de todas las formas. Una persona que quiero mucho una vez me dijo que soy muy adorable, pero que escondo todo bajo un manto de arrogancia y autosuficiencia. Y me refiero a poder brillar en el sentido de que todo eso que llevo adentro - mis cualidades innatas, la parte buena de ellas obviamente - se refleje en mi exterior. Nunca me consideré una persona materialista ni mucho menos lo soy ahora, pero es necesario hacerme cargo de mi imagen y de mis "looks". Sé que suena vanidoso y lo que quieran, pero hasta Oscar Wilde lo fue, y no le veo mucho de malo en querer perfeccionar cómo la gente me ve. Mi madre, a quien considero una de las personas más sabias que conozco y admiro demasiado, siempre acota que la sociedad reclama que te veas bien, mostrando así que nada falta y que una tiene autoestima. Y bien que a gente como yo le falta autoestima, por lo tanto un poco de maquillaje y ropa de diseñador (not really no voy a usar cosas caras no soy millonaria) no hará daño.

Volviendo a lo que son mis anhelos y metas, me puse una que sinceramente quiero alcanzar.Quiero escribirme a mí misma, es decir, recopilar todos estas entradas a diario donde hago catarsis, describo mis emociones/sentimientos, o hablo figuradamente de mi realidad y crear una especie de autobiografía, donde luego de cada cosa que escribí alguna vez, pongo una reflexión, y como afectó a futuro si es que alguna vez lo hizo. La cosa no es para hacer que todo el mundo sepa de mí, sino porque determiné que mi memoria necesita esa ayuda para no perder los recuerdos de lo vivido y lo que sentí alguna vez. No quiero olvidarme de mis sentimientos, ellos fueron los que hicieron que llegara a ser lo que soy, y ellos fueron los que me ayudaron a conseguir muchas cosas. Entonces su propósito consiste en guardar mi corazón dentro de papeles, a los cuales podré volver siempre y hacer que regrese a aquellos momentos y vuelva a sentir lo que alguna vez tuvo efecto en mí. No sé si es narcisista o lo que sea, no busco impresionarles, simplemente busco reencontrarme cada vez que me pierda.